Retomemos nuestro relato. Tras un primer contacto con Vanessa, llegó el primer día oficial de trabajo. Para ello, el Dream Team se dividió la tarea en 5 partes.
De la carrocería se encargó nuestro maestro chapista, que reparó el techo, tapando los agujeros que tenía con masilla y tratándolo con una imprimación especial en spray para evitar que entre el agua.
Nuestro maestro en mecánica se centró en el motor, desmontando también todo el frontal, el radiador, el compresor de aire acondicionado, el alternador, la bomba de agua, que estaba completamente destrozada, y la tapa de los balancines.
Los otros tres miembros del Dream Team que estuvieron presentes aquel día desmontaron todo el interior del coche, quitando lo que quedaba de vinilo, lijando un poco el techo y desmontando también la radio y descubriendo el suelo. Por supuesto, todas las piezas desmontadas fueron encintadas con sus tornillos y catalogadas, anotando en qué parte del coche iba y guardándolas cuidadosamente.
¿El resultado? Vanessa desmontada casi por completo y un día de trabajo muy muy provechoso. Lo podéis ver en las fotos
No hay comentarios:
Publicar un comentario